Es indudable que el comercio electrónico ha traído a las ciudades un volumen de actividad en términos de reparto de paquetes nunca visto anteriormente. Algunas ciudades comienzan a saturarse por ello. Más que nada porque es inasumible absorber tal volumen de vehículos de reparto. Tomar medidas comienza a ser necesario para muchas de ellas. Por ejemplo, en Barcelona, se están potenciando flotas sostenibles para la distribución urbana y creará una tasa Amazon en el marco de su estrategia eficiente, ecológica y ordenada.
Sin embargo, se precisan de más herramientas para hacer frente al problema de congestión urbana. Una de las soluciones que también se está barajando y que va cogiendo fuerza son los puntos de conveniencia y lockers. Es decir, puntos donde los operadores logísticos pueden dejar un paquete y los clientes recogerlos. Se trata de una solución de entrega y recogida que podría llegar a ser 24×7. Esto, que es pura conveniencia, es muy del agrado de los clientes. Según datos del estudio Global Smart Parcel Locker Market, en 2019 el mercado de Lockers se valoró en 542,8 millones de dólares. Se espera que crezca a una tasa de crecimiento de entre el 15 y 16% entre 2020 y 2027. Una oportunidad para ofrecer alternativas a los clientes, y también para el comercio tradicional, que puede rentabilizar mejor su espacio.